¿Quién está al otro lado de Joyería Amparo Romero?
Detrás del mostrador de Joyería Amparo Romero late el corazón de una familia que ha convertido su pasión en un legado. Lo que comenzó en 1985 como el sueño de Pepe y Amparo, él con su experiencia en una de los mejores talleres y ella con su don de gentes, hoy sigue vivo en manos de sus hijas Eva y Mónica.
«Somos una joyería con alma de pequeño comercio y el calor de una gran familia», explican. «Cada pieza que vendemos lleva nuestro sello: calidad artesanal, asesoramiento honesto y esa cercanía que solo damos quienes amamos lo que hacemos».

¿Por qué has abierto tu negocio en Alaquàs?
La elección del pueblo en 1985 no fue casual: «Un amigo nos dijo: ‘Alaquàs valora a quien trabaja con el corazón’. Y no se equivocó», recuerdan. Cuatro décadas después, esa apuesta por lo local sigue intacta: «Aquí no somos un establecimiento, somos parte de la vida de nuestros clientes. Vemos crecer a sus hijos, celebramos sus logros y acompañamos sus momentos especiales con nuestras joyas».
Para ellas, Alaquàs representa esos valores de comercio tradicional que hoy son más necesarios que nunca: «Donde el tendero te llama por tu nombre y sabe exactamente qué estilo te gusta».

¿Por qué formáis parte de CAdA?
Eva y Mónica no dudan: «CAdA es el motor que mantiene vivo el comercio local».
Destacan cómo la asociación dinamiza el pueblo, crea comunidad y promueve el valor de lo local. Afirman que «Sus iniciativas llenan nuestras calles de vida uniendo a pequeños negocios como el nuestro y enseñando así que detrás de cada escaparate hay historias como la nuestra».
«Cuando ves a clientes usando nuestra tarjeta CAdA, sabes que entienden lo importante que es apoyar al comercio de siempre», añaden con orgullo.
Joyería Amparo Romero es mucho más que oro y brillantes: es el testimonio vivo de cómo un negocio familiar puede convertirse en parte del patrimonio emocional de un pueblo. Como dicen Eva y Mónica: «Nuestras joyas no solo adornan cuerpos; guardan recuerdos de bodas, bautizos y cumpleaños de varias generaciones».